Como ya anunciábamos días atrás, nuestro alumno Fernández Ríos actuaba el pasado domingo en su pueblo natal, Pegalajar.
Era una fecha muy señalada en su calendario por lo que suponía y su actuación, en conjunto, fue muy rotunda, de mucha disposición por su parte; como se suele decir, estuvo muy en novillero toda la tarde.
Comenzó yéndose a la puerta de chiqueros a recibir a su novillo y ejecutó una larga cambiada con mucha limpieza. Tuvo un gran colaborador, puesto que éste fue extraordinario al igual que el resto de sus hermanos de camada.
En la faena de muleta estuvo notable y en el epílogo de la misma, acortó los terrenos y comenzó a arrimarse y meterse entre los pitones. Para poner el broche de oro, decidió entrar a matar sin muleta y dejó una buena estocada, aunque el novillo tardó en caer, por lo que tuvo que coger el descabello y no obtuvo la misma eficacia. Por este motivo, el premio fue sólo una oreja que pudo haber sido mayor de no haber fallado con el descabello.
Dejó patente la dimensión de torero muy hecho y su condición de gran valor que siempre atesoró.
Plaza de toros de Pegalajar. Media entrada en los tendidos. Novillos de la ganadería de Los Ronceles de juego extraordinario:
Ruiz de Jimena (azul y oro): Vuelta al ruedo.
Fernández Ríos (sangre de toro y oro): Oreja.
Miguel Uceda Vargas (grana y oro): Oreja.
Diego García (espuma de mar y azabache): Oreja.
Javier Illaguas (grana y oro): Oreja.
Manuel Casado (nazareno y oro): Oreja.
